lunes, 18 de agosto de 2008

Brotes de insomnio




Vivo en la dulce compañía del sol. Sol compañero de sueños. Siento que mi alma revolotea como una alondra que se posa nuevamente a tus pies. Las gotas de lluvia deshacen las farolas y tiñen la ciudad en un mar grisáceo. Miro al frente y diviso miles de cosas. Todo me recuerda a ti. Hasta el canto de los pájaros se parece a tu voz. Dile al sol que no salga, que estoy triste por ti. Dile a la lluvia que no venga, que hoy saldrán mis lágrimas a gritar la pena que me embarga. Es absurdo cerrar las puertas si tú tienes todas las llaves y llenarás mi alma de terrible cólera. Siéntate a mi lado, pero no me toques, no me escuches, no me mires.
No hagas que este corazón enfermo siga de por vida con tu herida abierta.
Como dijo M. Hernández: “ Cortar este dolor… ¿Con qué tijeras?”
No hay nada que pueda callar la rabia que me invade, el temo que me recorre y la soledad que me cobija.
Tus ojos son verde azulado o azul verdoso, según reflejen la claridad.
Viaje en las profundidades de la aflicción, abrazada a mi corazón. Todo es negro y no existe un lugar para la luz ni la esperanza. Todo es dolor, desidia y arrepentimiento.
Cuando te sientas a mi lado, nos contamos cuanto odiamos nuestras vidas, al mundo y a las equivocaciones. A veces nos odiamos hasta a nosotros mismos.
Vislumbro un rayo de luz en tu mirada abatida, un rayo de luz que atraviesa el humo espeso que me envuelve, que taladra el pesar que me inhibe, la lluvia que me moja, la negrura que tiñe mi alma.
Pero al rato desapareces y me conformo con mirarte desde fuera. Aunque ya te has ido, te siento muy dentro rellenando mi vacío con nubes de golosina, aviones de papel y muñecas de trapo. Sigues borrando el frío que atenaza mi alma.
Cuando te siento cerca, el sueño se detiene y el reloj vuelve a girar.
Y es que “sólo cuando lo perdemos todo somos libres para actuar”
El reloj sigue girando y se hace tarde, es demasiado tarde para volver. Me resigno con ver el barro en tus pisadas bajo una lluvia lacónica que entristece la luz de mi mirada. Dile a las estrellas que esta noche no salgan, que no se molesten en adornar el cielo, que descansen y duerman fugaces toda la noche. Aunque me duela, prefiero no mirar al cielo y ver las estrellas que contamos cada madrugada.
Siento una llama que me abrasa. Quemaduras como mil estrellas.
Un viento gélido mece mi alma en la tristeza, quiero salir de esta soledad que me encadena.
Todo esto tendría sentido si fuera real, pero…
¿Cómo se puede echar de menos algo que nunca ha ocurrido?

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Me gusta, aunque un poco sentimental, pero es profundo, sigue escribiendo, lo haces muy bien...

Anónimo dijo...

Enhorabuena Ariadna!!!

Anónimo dijo...

Pufff... Exactamente... Cómo echar de menos algo que nunca ha ocurrido.
Eso creo que es lo que me pasa a mi, bueno, parecido, yo no hecho de menos cosas que no han pasado, sino que recuerdo que lo que pasó no ha sido nada importante y que nunca pasará lo que quisiera imaginarme.
Creo que muchos blogs reflejan el mismo tono, soledad, amor, desesperación, melancolía... en fin... Me alegro de que haya gente que está en las mismas que yo (mal de muchos consuelo de tontos) y muchas gracias por pasarte a leer y comentar!!


Animo chelista!

Anónimo dijo...

"¿Cómo se puede echar de menos algo que nunca ha ocurrido?"

Deseamos que sucedan cosas que en parte hemos vivido en el pasado, pero no tal como queríamos exactamente. Por eso los deseos y los recuerdos se confunden y, si no me equivoco, de ahí podría nacer tu sensación y pregunta.

Para combatir la tristeza y derrotarla, al menos en una batalla, quizás te pueda servir esta canción: http://www.youtube.com/watch?v=qtpSGnD-b6A

En fin, me gusta como escribes. Y quisiera invitarte a que te pasaras por mi blog: http://el-abogado-de-sofia.blogspot.com/

¡Un saludo!

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo con el abogado,sólo se puede echar de menos lo que ya ha ocurrido.
Lo demás es simplemente que nos gustaría que ocurriese. De todas formas bonito texto...me gusta como escribes y enhorabuena por tus premios. Tu poema "amigo" es genial,änimo que lo haces muy bien ariadna.